Espacios abiertos de creación e invención
por Miquel Cañada
Centro Europeo de Empresas e Innovación de Castellón (CEEI Castellón)
Publicado el viernes, 23 de diciembre de 2016 a las 13:59
El movimiento “maker" está en plena expansión en todos los rincones del mundo, de norte a sur y de este a oeste, por todo el planeta se está difundiendo una filosofía que puede cambiar la forma que tenemos de ver los objetos entre otras muchas cosas. De esta filosofía de “hacedor” (traducción literal de “ maker”) surgen unos espacios donde poder encontrar recursos materiales y recursos humanos que facilitan la realización de proyectos de fabricación, diseño y electrónica, es decir un sitio donde poder convertirse, de alguna forma, en una inventora o inventor.
Recursos para poder crear, fabricar, innovar, reparar o incluso cambiar el mundo, aunque esto no se trata de ninguna novedad, siempre han existido personas que han inventado, creado y reparado, se trata de una novedad en cuanto al planteamiento y a la forma de ejecutar este proceso. La diferencia está en la democratización de estas tecnologías y conocimiento y también en el empoderamiento de las personas.
Lo que tradicionalmente ha sido un sector privativo y reservado, de difícil acceso, con un carácter muy industrial, apartado de la gente en general, con conocimientos muy específicos, ahora se está abriendo a las personas (sin importar cuánto saben de fabricación, diseño o electrónica) y se está convirtiendo en algo posible de realizar para todo el mundo, cualquier persona que lo desee o lo necesite, puede venir a estos espacios (que suelen llamarse Laboratorio de Fabricación o FabLab en inglés) a fabricar, inventar o reparar casi cualquier cosa.
Desde que nos rodeamos a lo largo del día de productos materiales, aparatos electrónicos, en definitiva, de objetos que se rompen, que se diseñan, se fabrican y que usamos constantemente, está surgiendo una necesidad de adquirir conocimientos relacionados con este ámbito y también poder acceder a recursos para poder trabajar con ellos y no depender de una industria de estándares y del ya famoso “comprar-usar-tirar”.